Pasadas las fiestas navideñas y una vez que nuestra Poinsettia comienza a perder sus hojas, es momento de tener en cuenta una serie de cuidados que harán que nuestra planta pueda florecer otra vez para la próxima Navidad.
Es importante mantener los mismos cuidados durante todo su periodo de vida:
- Mantenerla a una temperatura ideal de entre 15° y 25°C.
- Buena humedad ambiental, esto implica mantenerla alejada de fuentes de calor como la calefacción, que resecan el ambiente.
- Riegos moderados a lo largo del año, evitando que el sustrato seque o se encharque, pero manteniendo el nivel de humedad. Durante los meses de verano los riegos serán más frecuentes, a diferencia del invierno donde serán más espaciados.
- Colocarla en un sitio donde reciba luz intensa indirecta. Cuidar que esté protegida a la exposición directa del sol, sobretodo a primeras horas del día.
Poda:
Una vez que la planta pierda sus hojas, debemos cortar sus tallos aproximadamente a 10cm. de la base de la planta.
OJO: La savia de la Poinsettia puede ser irritante para la piel. Utiliza siempre guantes al realizar este procedimiento, evitando el contacto con ojos o mucosas y lavando siempre las manos al terminar.
Abono:
También es importante utilizar un fertilizante universal (siguiendo las instrucciones del fabricante), una vez cada 10-15 días.
Trasplante:
Si en la zona en la que vives han pasado ya las heladas, puedes trasplantarla a un jardín o mantenerla en maceta en el exterior.
Tip PRO:
Si has aplicado bien estos cuidados, en diciembre tu planta volverá a florecer. Sin embargo para conseguir que sus brácteas alcancen esos colores que las caracterizan, deberás mantenerla en oscuridad total durante 12-14 horas al día desde mediados de septiembre y hasta mediados de octubre.
¿Conocías estos cuidados? ¿Estarías dispuesto a aplicarlos a tu Flor de Pascua?